El bienestar mental se trata de cómo se siente tu mente y tu cuerpo y cómo interactúas con los que te rodean. Significa ser capaz de manejar los altibajos de la vida, mantenerte conectado con los demás y cuidarte a ti mismo. No se trata solo de sentirse “okay” o “bien”, se trata de tener la fortaleza y el apoyo para superar los momentos malos y disfrutar de los buenos.
El bienestar mental no es solamente cómo lo vives por dentro, sino que está determinado por tu entorno, tus experiencias, tu cultura y el mundo que te rodea.
Tanto el lugar donde vives como tus orígenes y tu comunidad desempeñan un papel en cómo te sientes, influyendo en tus emociones tanto positivas como negativas. También pueden influir factores que no se ven, como ciertas características únicas que heredamos de nuestra familia y la forma en que el mundo que nos rodea reacciona ante ellas. La discriminación, el racismo, la homofobia y otros obstáculos sistémicos pueden generar estrés, causar trauma y afectar tu bienestar.
Estos desafíos son reales, pero apoyándonos los unos a los otros y procurando que la comunidad sea más unida, podemos ayudar a que todo sea mejor.
Comprender los factores que afectan nuestro bienestar mental nos permite apoyar a los demás y ayudarnos a nosotros mismos.
- Los trastornos de salud mental pueden afectar nuestro bienestar general. Algunas personas sufren trastornos de salud mental que afectan su bienestar general. Por ejemplo, la ansiedad o depresión pueden quitarte el sueño, afectar tu concentración o influir en cómo te sientes e interactúas con los demás a lo largo del día. También pueden hacer que las tareas diarias te resulten pesadas o abrumadoras.
- Las experiencias que vivimos le dan forma a nuestro bienestar. Los desafíos diarios relacionados con el trabajo, la familia, las finanzas o cambios en la vida pueden afectar nuestro bienestar. El estrés por facturas pendientes, la preocupación por las calificaciones de los niños en la escuela o momentos importantes, como una mudanza o un cambio de trabajo, pueden afectar tu salud mental. Lo mismo ocurre cuando escuchamos, vemos o leemos las noticias. El trauma causado por experiencias del pasado puede dejar efectos duraderos en la forma en que sentimos y respondemos a las situaciones que la vida nos presenta.
- El modo en que los demás reaccionan a diferentes aspectos de tu identidad puede resultar particularmente abrumador. Enfrentar un trato injusto debido a tu raza, origen étnico, nivel de ingreso, género o a quién amas puede ser negativo para tu bienestar mental. Puede hacerte sentir estresado, desesperanzado, enojado o con la impresión de que no perteneces a ese lugar. También puede dificultar que pidas ayuda u obtengas la atención y el apoyo que necesitas.
Aunque estos tipos de desafíos pueden afectarnos a todos, las personas que pertenecen a comunidades de bajos recursos pueden enfrentar obstáculos adicionales, incluyendo la falta de acceso a la atención adecuada cuando la necesitan.
Encuentra fortaleza:
Muchas comunidades cuentan con firmes sistemas de apoyo basados en la familia, los amigos o tradiciones culturales. Apoyarse en esas conexiones puede ser muy útil.
Ejemplos:
iglesias, ligas deportivas recreativas, familia elegida, barberías o salones de belleza y mas.
Mereces apoyo:
Si sientes que la carga de estas presiones es demasiado pesada, está bien hablarlo con alguien. Hablar con una persona de confianza puede cambiar mucho las cosas.
Nota:
Compartir tu historia y escuchar las de los demás nos recuerda que otros también enfrentan dificultades parecidas.
El camino para lograr tu máximo bienestar no es uno solo
Cuidar tu bienestar mental puede significar distintas cosas para cada persona. Podría ser tomarte un tiempo para ti mismo, hablar con un amigo de confianza, pasar tiempo con la familia o hacer algo que te guste. Formar parte de un grupo que brinda apoyo, como una iglesia, un vecindario o una familia elegida, también puede ayudarte a sentirte fuerte y conectado.
No importa cuál sea tu historia, tu bienestar es fundamental. No estás solo, y hay gente y recursos para ayudarte. Juntos, podemos construir un mundo donde todos nos sintamos seguros, fuertes y respaldados.
Cuando se trata de una crisis o es necesario apoyo clínico
Una crisis de salud mental puede presentarse de varias formas. A veces, la vida se siente demasiado pesada y es difícil encontrar una manera de salir adelante. Otras veces, puede parecer que todo está fuera de control.
Lo cierto es que una crisis de salud mental puede ser diferente para cada persona.
Puede incluir:
- Pensar o elaborar un plan para lastimarte o lastimar a otros
- Sentirte desanimado, asustado o incapaz de sobrellevar la situación
- Estar tan abrumado que sientas que eres incapaz de salir adelante
- Sentir que no tienes la energía suficiente para llevar a cabo las tareas diarias, como ir a trabajar o cuidar a tus hijos
- Cerrarte o aislarte de todos los que te rodean
Si te sientes así, o conoces a alguien que se sienta de ese modo, es importante buscar ayuda de inmediato.
Cada día, miles de coloradenses de orígenes diversos buscan ayuda cuando sienten que están en crisis.
Los recursos disponibles incluyen:
- Líneas de apoyo en caso de crisis: Apoyo gratuito y confidencial disponible 24/7 llamando, enviando un texto o chateando en línea con la Línea 988 de Salud Mental de Colorado.
- Hablar con alguien: A veces resulta difícil reconocer de que estás en crisis. Hablar con un amigo de confianza, un miembro de tu familia o un consejero de la comunidad, como un líder religioso, puede ayudarte a comprender lo que te sucede e indicarte cómo encontrar el apoyo que necesitas.
- Apoyo clínico: Obtener apoyo clínico, como terapia, consejería o medicación, no significa que algo ande mal contigo. Significa que estás dando un paso importante para sentirte mejor. Estos recursos pueden ayudarte a fortalecerte y encontrar alivio para las sensaciones que causan los sentimientos abrumadores.
Sabemos que no siempre es fácil conseguir ayuda.
El costo, la barrera del idioma y las diferencias culturales pueden dificultarlo. Existen organizaciones y servicios que comprenden tus necesidades únicas, como programas comunitarios o consejeros con los que te sientas cómodo para hablar. Aquí tienes algunos recursos que pueden ayudarte en tu búsqueda:
Psychology Today: te permite buscar consejeros filtrando por etnicidad, idioma, seguro, identidad, religión, estilo de terapia, especialidad y costo.
Únete a un grupo de apoyo virtual: muchas plataformas de redes sociales ofrecen grupos privados donde las comunidades pueden compartir recursos y formas de apoyo culturalmente relevantes para la salud mental.
Busca en línea: busca tu identidad, religión o comunidad junto con términos como “apoyo para la salud mental” o “programas de consejería”.
Busca en iglesias, mezquitas y sinagogas locales: muchas ofrecen grupos de apoyo o consejería.
Busca organizaciones sin fines de lucro alineadas con tus valores o identidad: es posible que tengan programas específicos para tu comunidad.
Échale un vistazo a nuestra página de recursos para ver más opciones de apoyo gratuitas y de bajo costo.
Encontrar el apoyo adecuado es importante, por lo que vale la pena dedicar un poco de tiempo a la búsqueda para hallar a alguien que realmente te comprenda.
No estás solo, hay ayuda disponible para todos.